Bienes sustitutos

Dos bienes son sustitutos cuando un incremento en el precio de uno lleva a un aumento en la cantidad demandada del otro, y viceversa, una reducción en el precio de uno lleva a una reducción en la cantidad demandada del otro, esto es debido a que los bienes sustitutos son bienes que pueden ser consumidos uno en lugar del otro, ya que cumplen la misma funcionalidad y satisfacen la misma necesidad o deseo.

Ejemplos de bienes sustitutos

Cuando el precio de un bien aumenta, los consumidores buscan reducir el consumo del mismo, y alternativamente buscan otros bienes que puedan ser consumidos en su lugar, un buen ejemplo puede ser el té y el café, que se consumen en situaciones similares como en la mañana o durante las pausas laborales, si el precio de uno de ellos aumenta algunas personas empezarán a sustituirlo por el otro. La mantequilla y la margarina también es un buen ejemplo, ambas se utilizan para untar en el pan, cocinar y hornear, por tanto son intercambiables la una por la otra y se pueden utilizar para el mismo propósito.